Espera, esperar, esperando
y el gerundio me agrede, me ofende, me aturde
esperando sin vocación,
sin voluntad, sin suficientes razones
esperando en estado durativo
dubitativo, cualitativo, punitivo
con la glándula de la paciencia hinchada
debilitada, vapuleada, terminada
soy la espera conjugada en todas sus formas
esperando en el mismo modo
en distintas condiciones
en todos los tiempos
esperando sin excusas circunstanciales
creyendo que la espera es una excepción
un momento que el cuerpo concede
una fe en estado de reposo
la espera corroyendo, corrompiendo, convirtiendo
cada célula en caníbal
una enfermedad que va aumentando el ingenio
inventando excusas mágicas
creyéndome que es una prueba que estoy superando
pero el –ando se perpetúa, se eterniza, evoluciona
la espera es pura energía
no se crea, ni se destruye; se transforma
estoy odiando la espera y por ende la conservación
y vivo reciclándola como una autómata
como si no tuviera otro remedio
porque la espera auspicia la producción
la espera alberga a la literatura
en las salas de espera es donde la gente lee
pretendiendo disminuir el tiempo
como si dirigir la energía a las palabras
la hiciera menos dañina
la espera es siempre una pérdida,
pero también los son las decisiones,
renuncias cargando incertidumbres
maldigo la termodinámica
pero me amparo en la segunda
que se degrade por Dios esta maldita espera
yo convirtiéndome en una entropía inútil
el tiempo es una bicicleta estática
yo con el pulgar del pie dentro de la boca
sigo siendo una rueda elíptica
un gerundio desesperado
una espera solitaria que no tiene un a-, un por-, ni un de-
y el gerundio me agrede, me ofende, me aturde
esperando sin vocación,
sin voluntad, sin suficientes razones
esperando en estado durativo
dubitativo, cualitativo, punitivo
con la glándula de la paciencia hinchada
debilitada, vapuleada, terminada
soy la espera conjugada en todas sus formas
esperando en el mismo modo
en distintas condiciones
en todos los tiempos
esperando sin excusas circunstanciales
creyendo que la espera es una excepción
un momento que el cuerpo concede
una fe en estado de reposo
la espera corroyendo, corrompiendo, convirtiendo
cada célula en caníbal
una enfermedad que va aumentando el ingenio
inventando excusas mágicas
creyéndome que es una prueba que estoy superando
pero el –ando se perpetúa, se eterniza, evoluciona
la espera es pura energía
no se crea, ni se destruye; se transforma
estoy odiando la espera y por ende la conservación
y vivo reciclándola como una autómata
como si no tuviera otro remedio
porque la espera auspicia la producción
la espera alberga a la literatura
en las salas de espera es donde la gente lee
pretendiendo disminuir el tiempo
como si dirigir la energía a las palabras
la hiciera menos dañina
la espera es siempre una pérdida,
pero también los son las decisiones,
renuncias cargando incertidumbres
maldigo la termodinámica
pero me amparo en la segunda
que se degrade por Dios esta maldita espera
yo convirtiéndome en una entropía inútil
el tiempo es una bicicleta estática
yo con el pulgar del pie dentro de la boca
sigo siendo una rueda elíptica
un gerundio desesperado
una espera solitaria que no tiene un a-, un por-, ni un de-
7 comentarios:
sos grosa!!!! ya tenes fans en la argentina
hola edmaris!
me encanta la foto de los tacos con colmillos, wow. felicidades por el nuevo blog!
cómo vas encuadernando?
And we are off to a great start!!!
La gesta pertenece al pasado,bienvenida al universo!...a este Planeta de canibales y de pasivos al mismo tiempo conviven.La espera ha pasado ahora a probar tus genes,tus escogidas metas y resoluciones, porque eres todo presente; el pasado no existe esta mas lejos que la lejania y el futuro a penas hace senas de cuajar. Eres presente y tu cria y linaje...Tu DNA dirá! Titi Vilma
bello edmaris. la foto está chulísima, como que te va. que bueno poder leerte otra vez, cuánto va? tres años? en fin, me siguiré paseando. te puedo linkear a mi blog?
un abrazo,
margarita pintado
edmaris apoyandote siempre
El futuro esta en tus manos... Adelante y muchas bendiciones para ti!
Cariños siempre,
Debbie
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